Grifo lavabo empotrado con caño 26 cm

• Cuerpo de la griferia: Latón
• Monomando: Latón
• Longitud del caño: 26cm

Una de las tendencias en decoración desde hace años es la de apostar en la zona del lavabo por la grifería empotrada en lugar de los grifos instalados sobre el lavamanos. Esta opción ofrece los mismos resultados, pero con un toque estético extra que aporta originalidad, aunque esta no es la única de sus ventajas.

Este Grifo lavabo empotrado es un modelo con cuerpo fabricado en latón, a igual que el monomando, que tiene una longitud de caño de 26 cm, con un atractivo acabado cromado que encajará perfectamente en cualquier cuarto de baño, tanto en aquellos que tienen una apariencia y un estilo contemporáneo y moderno hasta quienes prefieren un aspecto un tanto más clásico.

El Grifo lavabo con caño 26 cm está disponible con una gran relación calidad precio y está fabricado con materiales de una máxima resistencia y durabilidad. Además de tener un diseño sobrio y elegante, ofrece grandes ventajas al estar empotrado en la pared, empezando por la gran ventaja que supone poder disfrutar de un lavabo más limpio. Al estar colocado en la pared tan solo sobresale el mando y el caño, por lo que es mucho más rápido y fácil de limpiar. Al mismo tiempo, la superficie queda mucho más despejada para generar una sensación de amplitud o bien para colocar diferentes accesorios.

Al contrario de lo que se pueda pensar, su instalación es muy sencilla. Desde hace años este tipo de grifos están muy presentes y para cualquier especialista no le supondrá ningún problema su colocación, por lo que podrá llevarla a cabo de una manera rápida y con una dificultad muy similar al de las soluciones vistas o empotradas en el propio lavabo.

Al ser monomando, este grifo también permite disfrutar de sus ventajas, como es el hecho de poder regular la temperatura y el caudal de agua con una sola mano y en un solo gesto. De esta forma es posible obtener la cantidad de agua deseada en la temperatura óptima.